sábado, 10 de octubre de 2009

HASTA QUE EL SOL SE APAGUE


Vive un lugar
dentro nuestro

e irisado

su transparencia
embebe

nuestro desear
sagrado

cada mirar

sus brillos



hay un lugar

siempre

donde su fuego

enciende
el destino

y entibiará
tu sentir

que se muere



ese lugar

reflejo

que brotará
hereje

hacia otro lar
el alma

santo
te espera

tus manos



porque sin vos
no hay hoy

no hay nada

porque sin vos
amar
sería en vano

porque sin vos

las guerras
no acabarán

su llanto



hasta que el sol
se apague
te esperará

no temas

hasta que el sol
se apague

en la sangre.

1 comentario:

voluntarios dijo...

...hay un lugar siempre donde su fuego enciende el destino...
pegó